Arte y antropología tejen relaciones complejas que resultan del replanteamiento autocritico de las ciencias sociales y del surgimiento de prácticas artísticas que tienden a integrarse al espacio cotidiano y a la vida. La rotunda diferencia de antaño entre estas dos disciplinas se ha ido derrumbando. El 'antropólogo como autor' y el 'artista como etnógrafo' convergen en varios aspectos de su cuestionamiento epistemológico, ahora que la investigación artística se reivindica como generadora de saber facultando la comprensión de la realidad y que las ciencias sociales reconocen sus actos creativos como tal y exploran su posicionamiento en los procesos de cambios sociales. A partir de un proceso pedagógico que conjunta a antropólogos, historiadores, etnógrafos, artistas y teóricos, maestros y estudiantes, este libro reúne reflexiones y presenta experiencias puntuales de más de 70 participantes, dispuestas en un campo de juego que se ofrece al lector interesado en establecer puentes entre estas prácticas.