A 20 años del Tratado de Paz en Guatemala, Conferencia por la Paz resume este acontecimiento, definiéndolo como: "Un poderoso legado para nuestra humanidad y para nuestra historia contemporánea de Mesoamérica y América Latina". En este recuento la autora destaca el papel de México durante estos acuerdos, ya que "fue un país de respaldo, fue un país hospitalario, pero, a la vez, México tuvo una acogida de los Acuerdos de Paz como nunca ningún otro país de la región de nuestro continente".